¿Cómo puedo comprobar si merece la pena pedir un préstamo?

343

Hoy en día hay muchas consultas en Internet sobre «cómo pedir un préstamo». Pero, como demuestra la práctica, para la seguridad financiera de muchos prestatarios potenciales es mucho más relevante la respuesta a la pregunta «cómo NO pedir un préstamo». Después de todo, si sobreestima su fuerza y la necesidad de crédito, se convierte de una herramienta útil en una carga. Veamos cómo evaluar de forma independiente la necesidad de un préstamo.  

Todo es cuestión de mente fría  

Se puede pedir un préstamo en unas horas, pero se tardan años en devolverlo. Quizá el principio fundamental de los préstamos sea no hacer nada de golpe. Cualquier decisión importante debe posponerse y meditarse detenidamente. Quizá dentro de una semana o dos veas la situación de otra manera, obtengas nueva información y vuelvas a evaluarla internamente. Y entonces puede resultar que el problema que le parecía tan urgente, en realidad tiene otras vías de solución o no es un problema en absoluto. De repente, la decisión resultará ser sólo un destello de emoción o la influencia de circunstancias momentáneas.

Psicólogos y financieros han llegado a un consenso: cuando se piensa en un préstamo, lo mejor es marcar el tema en la cabeza y tomarse un tiempo muerto de aproximadamente un mes. Durante este tiempo, nuestro cerebro, por regla general, tiene tiempo para reiniciarse, y si tus puntos de vista y circunstancias no han cambiado durante este tiempo, entonces realmente merece la pena empezar a pensar seriamente en este tema.  

Tres preguntas  

Un método bastante sencillo y casi infalible para evaluar la utilidad de un préstamo es responderte a ti mismo con sinceridad a tres preguntas consecutivas. Una vez contestadas, comprenderás hasta qué punto necesitas el préstamo, o te darás cuenta de que estabas equivocado en la primera o segunda pregunta, comprendiendo que estabas bajo la influencia de la emoción o que el problema tiene otra solución.  

La primera pregunta es: ¿tendré el beneficio de este préstamo durante más tiempo del que voy a devolverlo?  

Por ejemplo, tienes un préstamo a tres años. Pero quieres gastarlo en comprar algo que dentro de un año será irrelevante o estará fuera de servicio. Un ejemplo clásico de este tipo de préstamo, que a los expertos financieros les gusta citar, es la compra de un smartphone. Este tipo de cosas se quedan obsoletas muy rápidamente, y resulta que pagas el precio completo, con intereses, por un aparato que ya ha perdido el 50-70% de su valor. El segundo ejemplo clásico es un préstamo para unas vacaciones o una boda. El placer es para unos días, y lo pagarás durante tanto tiempo que arruinará todo el positivismo.

Pero también hay campeones inequívocos en la categoría de beneficios a largo plazo. Por ejemplo, un préstamo para tu propia educación. Con él ganarás durante muchos años, y la inversión estará más que amortizada. La salud también es una razón de peso para el préstamo «adecuado». Lo mismo ocurre con la compra de algún equipo, gracias al cual ganas dinero, o de bienes inmuebles, que utilizas tú mismo y puedes transmitir a tus nietos.  

La segunda pregunta requiere un poco de introspección: ¿por qué voy a pedir un préstamo? 

Las respuestas más desafortunadas a esta pregunta serían: «para presumir» o “para ser tan bueno como la gente”. Esto significa que el problema no es financiero, sino de naturaleza psicológica, y para no malgastar el dinero, debería solucionarse no con el banco, de lo contrario no hará más que aumentar sus dificultades financieras.  Sea realista cuando piense en su préstamo. El dinero es algo material y sólo te ayudará a hacer frente a problemas materiales, pero nunca te ayudará de forma fiable a elevar tu autoestima o a establecer relaciones con otras personas.  

La tercera pregunta requiere conocimientos matemáticos y una evaluación sobria de tus finanzas. 

Calcula los costes potenciales de un préstamo (hay calculadoras de crédito en Internet) y respóndete objetivamente: ¿podrá mi cartera sacar adelante los pagos mensuales?

La referencia numérica es conocida desde hace tiempo: el límite para el reembolso de un préstamo empieza en el 30% de los ingresos mensuales. Si es más, aumenta el riesgo de morosidad, y ya es difícil para el prestatario. Por lo tanto, sea sincero consigo mismo y evalúe su potencial financiero, incluidas las opciones de ingresos adicionales.

Volver al blog

Las ofertas más convenientes para ti

100% online
  • Monto hasta hasta 24 000 MXN
  • Período hasta 180 días
  • Aprobación 97%
100% online
  • Monto hasta hasta 45 500 MXN
  • Período hasta 1800 días
  • Aprobación 97%
100% online
  • Monto hasta hasta 2 000 MXN
  • Período hasta 180 días
  • Aprobación 97%
100% online
  • Monto hasta hasta 20 000 MXN
  • Período hasta 30 días
  • Aprobación 97%